Otra vez a vueltas con el 0,7

LA FEDERACIÓN ARAGONESA DE SOLIDARIDAD DENUNCIA LA FALTA DE COMPROMISO DE LAS INSTITUCIONES ARAGONESAS PARA LLEGAR A DEDICAR EL 0,7% DE SU PRESUPUESTO A COOPERACIÓN INTERNACIONAL EN EL 2015.

MARIO GRACIA (21/02/2009)


Con luces y sombras. Así es el balance que la Federación Aragonesa de Solidaridad (FAS), principal agrupación de oenegés y colectivos de solidaridad internacional de la comunidad, hace de la de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) aragonesa. La FAS acaba de hacer público esta semana su informe anual sobre la Cooperación descentralizada al desarrollo en la comunidad autónoma de Aragón. En este documento se desgrana la contribución de las principales instituciones públicas aragonesas --Gobierno autonómico, diputaciones provinciales y ayuntamientos de más de 3.000 habitantes-- a proyectos de desarrollo y acciones de ayuda de emergencia.
Las cifras corresponden al ejercicio del 2007, el último liquidado. El texto señala un aumento generalizado de las partidas destinadas a cooperación. Pero también critica la falta de un compromiso calendarizado hacia la meta del 0,7% del presupuesto para el 2015, tal y como establecieron las Naciones Unidas en la Cumbre del Milenio del 2000. "Como media estamos en el 0,20% --señala Fernando Pérez Valle, presidente de la FAS--. Queda mucho por avanzar. Por eso insistimos en el asunto de la calendarización en términos económicos. Es decir, en el 2015 hay un compromiso por parte de todos los países, y las instituciones aragonesas tendrían que ir en esa línea", apunta.
En este sentido, el caso del Gobierno de Aragón es "muy peculiar", señala Pérez. "La consejera (Ana Fernández) se comprometió a aumentar un 20% el presupuesto de cooperación cada año sobre el neto del ejercicio anterior. Y eso lo está cumpliendo. Pero nuestro caballo de batalla es que la vara de medir sea el porcentaje del presupuesto total", explica. De todos modos, Aragón sigue en el puesto número 14 en cuanto a esfuerzo presupuestario entre las 17 autonomías españolas.
El mayor "aplauso" de la FAS se lo lleva el Ayuntamiento de Zaragoza, el tercer donante en términos absolutos entre los municipios españoles de más de 500.000 habitantes. "Estamos orgullosísimos de este hecho", reconoce Pérez. Pero la FAS sigue vigilante. "Ya hemos tenido dos reuniones de seguimiento del Pacto contra la Pobreza", suscrito por todos los partidos del ayuntamiento en plena campaña electoral del 2007. "El resultado es bueno pero no se puede bajar la alerta porque el pacto no tiene carácter vinculante. Aun así, esa sería la solución para el Gobierno de Aragón", sugiere.
La FAS también piensa mantenerse vigilante ante la coyuntura económica. "La solidaridad es lo único que no puede estar en crisis. El que menos tiene va a estar peor. La situación de crisis la hemos generado nosotros, con los mismos ingredientes con los que se ha generado la pobreza en los países del sur. De alguna manera, si cabe, deberíamos tener más responsabilidad con los países empobrecidos", sentencia. "Lo que nos preocupa es la utilización de la crisis como excusa", espeta.
Otra de las críticas es que "algunas administraciones parecen basar su resolución --de las subvenciones-- en el reparto entre los solicitantes", lo que acaba provocando "financiaciones parciales que comprometen la viabilidad económica" de los proyectos. Pérez pone un ejemplo. "Si en un ayuntamiento se presentan a financiación las diez oenegés que tienen implantación en el pueblo, reparto a partes iguales y todos contentos. Pero ese es un criterio erróneo. Hay que ver el impacto de cada proyecto y si, de esos diez, dos son buenos, pues apoyar esos dos. No se puede hacer un proyecto con diez financiadores. Eso es una auténtica locura, no hay quién lo justifique ni quien lo ejecute. Pero también ahí las instituciones van teniendo su aprendizaje", concluye.